Calzada romana cerca de la antigua Clunia

El amor y la atracción entre Sédrik y Libia, el joven celta de las tribus britanas y la númida de piel oscura, ambos esclavos del romano Marco, le hacen evocar a éste la mezcla de tribus, culturas y razas que conviven en Hispania y a las que han tenido que hacer frente las legiones en diferentes campañas con el fin de dominarlas (Ver el post: MEMORIAS DE MARCO. HISPANIA (V). VÍAS Y CAMINOS). Y, con ello, llega a pensar en la variedad de obras de ingeniería que ha construido, y que tendrá que seguir construyendo la imperial Roma, para unir, comunicar y abastecer a los diferentes pueblos y ciudades de la floreciente provincia romana al oeste del Mare Nostrum. En la última entrada publicada, Marco piensa en los caminos y, en concreto, en cuatro vías importantes de la península Ibérica.
    La idea que la mayoría de nosotros tiene de estos caminos es la que hemos visto en muchas películas o en los cómics de Astérix: anchas plataformas pavimentadas, en su superficie, por losas de piedra perfectamente trabadas y concertadas entre sí. Nada más lejos de la realidad. Aunque este tipo de sección se daba y existía, sin embargo se dotaba con esa forma, normalmente, a las calzadas urbanas y de tránsito de personas. Las vías para paso de caballos, carruajes, y desplazamiento de tropas y legiones, la inmensa mayoría, se ejecutaban con materiales granulares en su superficie para mejor agarre de pezuñas y ruedas.

    En el siguiente vídeo de unos cuatro minutos de duración se explica perfectamente por el ingeniero Isaac Moreno Gallo las capas de terraplén y explanada de los caminos y calzadas comunes del Imperio Romano. Se toma como ejemplo una vía que discurre por la antigua colonia romana de Clunia, entre Burgos y Soria. 

    En él aparecen los conceptos de capacidad portante y zahorra natural, que se definen a continuación:

Capacidad Portante. Es la resistencia del terreno a la deformación ante las fuerzas que debe soportar.

Zahorra natural. Es el material formado por áridos (material granulado que se utiliza como materia prima en la construcción, principalmente. Lo que comúnmente conocemos como piedras, vamos) no triturados, procedentes de graveras o depósitos naturales, o bien suelos granulares, o una mezcla de ambos, cuya granulometría (que es la medición y graduación de los diferentes tamaños de partículas de un mismo material, árido o suelo) es de tipo continuo (se dice que una granulometría es continua si el árido o el suelo está uniformemente graduado en todos sus tamaños, desde los más gruesos a los más finos, es decir, que no hay <<saltos>> en algunos de sus tamaños). 

    En los momentos finales del breve documental se puede apreciar cómo habría sido el empleo de una cabria de rueda, y que ya hemos nombrado en anteriores entradas, durante la ejecución de un puente.

    Os lo dejo. Como siempre espero que guste. Hasta la próxima.